VACIO ALTAR.

Qué bello es ver amanecer.
El futuro nadie lo conoce.
Luces de la mañana, venid hacia mí.
Estrellas del presente, dejadme salir.

La soledad no me deja vivir.
De la oscuridad sólo quería partir.
Cuanto desprecio me provocaba la noche.
Me causaba dolor, locura y horror.

Caminando sin rumbo.
No sabía nunca donde ir.
La próxima estación.
Era a la que quería llegar.
Me daba lo mismo, uno u otro lugar.

Después de mucho tiempo.
Encontré mi lugar, encontré un altar.
Vacío, nada hacía falta.
No quería predicar, sólo quería sonreír.
Sólo quería vivir, no quería nada más.

La soledad…

Después de mucho tiempo...