LA FRESA.

Me gusta esa fresa que llevas tatuada en el culo.
Nunca había visto un mejor tatuaje.
Me encanta perder el tiempo.
Rodeado de sueños y humor.
De sonrisas no retocadas, de saliva que me empapa.
De ese perfume.

De estanques que se vuelven ciénagas.
De cisnes que se tornan cuervos.
¿Dónde está, donde estará,
Esa fresa que me gustaba?

Monta en este recuerdo dorado
Que se empaña contra esa almohada.
Que se agarra y exige eternidad.
Seguro que no sabes que hasta la fecha.
Ando sólo por este sendero, pero no me importa.
Esta alegre la llegada que repetiría.

Y esos estanques que se vuelven ciénagas.
Y esos cisnes que se tornan cuervos.
¿Dónde está, donde estará,
Esa fresa que me gustaba?