DONDE HAS PASADO EL DÍA.

Dónde has pasado el día. No te he visto por ningún lugar.
Te he buscado por muchos sitios, pero no te he podido encontrar.
No te escondas, divina alegría, tu hora acaba de llegar.
Nos llenarás con tu aliento de gloria, con tu fuego nos vas a abrazar.

He bajado de la montaña, mi serpiente viene detrás.
Mi águila me acompaña, traigo la luz que nos va a guiar.
Nos va a llenar de alegría y de vida.
De risas, de fiesta y de placer.
De aliento, de fuerza y de esperanza, que sea éste el nuevo amanecer.

Mucho tiempo fue de abismos y muerte, el cáliz de la vida está aquí.
Por fin han caído los ídolos, llegó la hora de vivir.
De alejarnos de falsos paraísos, consuelo de lo que no puede ser.
Que mi palabra sea más que un consejo.
Sea el mandamiento que hay que seguir.

Yo soy como el viento que sopla, soy el león que todos quieren ser.
Soy el águila que abre sus alas, soy el niño, el hombre y la mujer.
Soy la espada que siempre vence, soy el fruto que has de recoger.
Que se apaguen los fuegos antiguos, y que nunca se vuelvan a encender.

Este es el tercer tema de "un nuevo amanecer -disco 1-", en el que se nos habla de cómo, a base de fuerza y de intención, se pueden derribar todas las barreras que desde un inicio nos impedían alcanzar nuestros objetivos. Con fuerza, inteligencia y decisión, efectivamente, no hay meta que se antoje imposible, y todo, realmente todo, se puede llegar a conseguir.