CORRE, MUCHACHO, CORRE.

Parece que fue ayer cuando llegaste aquí.
Cuantas ilusiones, cuanto por vivir.
Parecía que el tiempo nunca te presionaría.
Te creíste rey por un momento y ni siquiera lo sabías.

Qué lejos queda tu pasado, que lejos aquellas espinas.
Qué lejos los duros momentos bajo aquella lluvia fina.
Miras adelante y te ahoga el futuro.
No lo pienses, no le des vueltas, nunca confíes en el mundo.

Corre, muchacho, corre, que la vida viene detrás.
Corre, muchacho, corre, no dejes de respirar.
Corre, muchacho, corre, que esto acaba de empezar.
Corre, muchacho, corre, si no el viento te llevará.

El filo reluce en la noche, las sombras te persiguen.
Un hechizo escondido hace que ni mires.
La carretera se estrecha, se acerca el final.
Era lo pactado y no lo puedes cambiar.

Dulces miradas pululan en tu mente.
Tiernas sonrisas, bellas y relucientes.
Escapas hacia ningún sitio, no puedes parar.
Ha merecido la pena visitar este lugar.

Corre, muchacho, corre…